1. Alta Eficiencia en el uso y los costos a lo largo de toda la cadena energética, tanto en la gestión de las energías primarias y en la producción, transporte y distribución de electricidad, como en la utilización de la energía por parte de los diferentes sectores de consumo: Residencial, Comercial, Industrial, Transporte, etc.

 

2. Sustentabilidad con una visión integral que abarca las 3 dimensiones: Ambiental, Social y Económica, junto al marco legal requerido. La aplicación del Modelo M2ES debe contribuir a la protección del ambiente, asegurar la calidad de vida de la sociedad en su conjunto y de las comunidades de todo el país. Debe ser económicamente viable tanto en los costos de producción y consumo de  energía como en las inversiones requeridas para su desarrollo.

 

3. Balance Estratégico Oferta-Demanda para facilitar que el diseño de los planes de desarrollo de la infraestructura energética (oferta) sean una efectiva y oportuna respuesta a las necesidades previstas (demanda) en función de las políticas de estado y planes a largo plazo de desarrollo sustentable nacional y provincial.

 

4. Diversificación y Equilibrio, para la utilización de las diferentes energías que componen la matriz energética, con una tendencia cada vez mayor al aprovechamiento de la Energía Nuclear y las Energías Renovables, y en consecuencia a la reducción en la utilización de los Hidrocarburos.

 

5. Alta Confiabilidad y Seguridad, con el objetivo de que la energía esté disponible según los más altos estándares, asegurando los márgenes de seguridad y las reservas de recursos que sean necesarias.

 

6. Impulsora del Desarrollo Nacional y Provincial, de manera que se disponga de la energía a costos competitivos para toda la cadena productiva del país en todas las localidades, y que a su vez el desarrollo de la infraestructura y fuentes energéticas promueva y potencie el uso de los recursos industriales y el talento nacional.